Asia

Nuevamente la atención del mundo esta centrada en Corea del Norte. Esta vez, no se debe a nuevos ensayos nucleares, a la agitación imperialista, o a un enfrentamiento militar con Corea del Sur a lo largo de la frontera más militarizada del mundo. Esta vez, la razón es potencialmente más explosiva: la muerte de Kim Jong-Il.

Acabamos de recibir esta carta de Kazajstán, que contiene un llamamiento importante en nombre de los trabajadores que han estado en lucha en condiciones muy difíciles durante los últimos siete meses. Los medios de comunicación occidentales, que son muy rápidos para denunciar los regímenes autoritarios en Libia y Siria, ha mantenido un vergonzoso silencio sobre la situación en este país rico en petróleo. Hacemos un llamamiento a la clase obrera mundial para expresar su solidaridad con los trabajadores de Kazajstán, que están luchando por sus derechos.

El caos y la masacre humana que perdura en Karachi desde hace  más de tres décadas se intensifican de forma periódica. Otra ola de esta violencia terrible se ha desatado en las últimas semanas. Sin embargo, esta ola de  horripilantes asesinatos  y  devastación no es la causa sino el síntoma de la severa enfermedad del sistema social y económico, esta crisis terrible es la que está empujando actualmente a la sociedad a las garras de la barbarie.

"Una nulidad de mediana edad, un fracaso político superado por la historia - por los millones de árabes exigiendo libertad y democracia en el Oriente Medio – murió ayer en Pakistán. Y entonces el mundo se volvió loco. "(Robert Fisk, 3 de mayo de 2011)

Es el peor desastre para Japón desde la guerra, desde Hiroshima y Nagasaki. Este triple golpe de un terremoto de fuerza-9, un maremoto, seguido de un desastre nuclear, ha sacudido al país hasta sus cimientos. Y las consecuencias de esta catástrofe multifacética se están ampliando cada día.

Se cumplen ya más de quince días desde que Japón sufriera un terremoto de proporciones colosales (8’9 en la escala de Richter, posteriormente elevado a 9 grados), el viernes 11 de marzo, seguido de un posterior tsunami que arrasó más de 500 kilómetros de costa que provocaron enormes tragedias personales y materiales.

15 de marzo 2011: El congreso de este año de La Lucha, la CMI en Pakistán, fue el más exitoso de todos los congresos celebrados hasta la fecha, con la asistencia más grande que nunca. La conferencia fue un evento especial, ya que marcó el 30º aniversario de la fundación de La Lucha. En ese período, La Lucha ha pasado de ser un puñado de compañeros a una organización grande con raíces profundas en la totalidad de Pakistán.

Los periodos revolucionarios son excepciones históricas. Las masas entran a la arena de la historia para transformar sus destinos con sus propias manos. El 18 de Octubre de 2007 observamos uno de esos momentos cuando Benazir Bhutto volvió de su último exilio. Una marea de oprimidos inundó las calles de Karachi. Los cálculos varían entre 1,5 y 2,5 millones.

Estamos viviendo en la primera década del siglo 21, en un periodo en que la marcha de la tecnología y la ciencia han conseguido milagros. Podemos poner un hombre en la Luna y enviar satélites para explorar los confines del sistema solar y más allá. Y, sin embargo en el año 2010, millones de hombres y mujeres se ven reducidos al nivel más primitivo, cercano a la barbarie. Ese era el caso en Pakistán, incluso antes de las inundaciones. Ahora, millones de personas pobres se aferran a la vida, y su alcance se debilita por momentos.

La Campaña en Defensa de los Sindicatos de Pakistán (PTUDC) ha puesto en marcha Comités Revolucionarios de Ayuda y de Lucha por todo Pakistán, especialmente en las zonas afectadas intensamente por las inundaciones, para desarrollar labores de rescate y socorro eficientes y eficaces. La Campaña ya ha montado cincuenta siete campamentos en diferentes regiones y está demandando ayuda.

Bangkok está en llamas en el momento en el que la violencia contrarrevolucionaria en Tailandia alcanza un clímax sangriento. El asalto largamente esperado del Ejército tailandés ya ha tenido lugar y no cesará hasta haya desaparecido todo rastro de la protesta. Nadie puede asegurar el número de bajas, pero la cifra final será sin duda mayor que la que las autoridades han admitido hasta ahora. Parece que algunos "Camisas Rojas" han respondido prendiendo fuego a los bancos, centros comerciales y otros edificios de la ciudad, y hay informes de que las protestas y la violencia hicieron erupción en otras partes de la ciudad.

En una área dominada por los talibanes en Pakistán, un abogado marxista ha derrotado al candidato de los fundamentalistas islámicos. A pesar de que se emitió una fatwa contra él, el camarada Ahad se mantuvo firme en las ideas del socialismo revolucionario y ganó el cargo de Presidente del Colegio de Abogados de Malakand.

Este verano El despertar rojo (Rato Jhilko, ver foto), una revista del Partido Comunista del Nepal publicó un artículo de Baburam Bhattarai, quien afirmaba que "el trotskismo es más relevante que el estalinismo para hacer avanzar la causa del proletariado". Éste es el resultado de la experiencia histórica concreta que ha revelado la auténtica esencia del estalinismo y vindicado las ideas de León Trotsky, en el caso de Nepal, particularmente la teoría de la revolución permanente.

Las experiencias pasadas de los maoístas nepaleses, y el fracaso de sus intentos por llevar a cabo una revolución por "etapas" ha conducido a un debate interno en el que algunos de sus líderes han concluido que el "camino nacional" no ha producido los resultados deseados y que lo que se necesita es una posición internacionalista.

Las fuerzas de la OTAN dirigidas por EEUU en Afganistán están librando una guerra imposible de ganar. Esta realidad comienza a calar en la conciencia de millones de personas en occidente que ahora se oponen a la guerra. Pero también en Afganistán hay síntomas de que la gente corriente está cansada tanto de las fuerzas de ocupación imperialistas como de los talibán. La única alternativa a la barbarie actual es la lucha por una federación socialista del Sur de Asia, que incluiría a un Afganistán socialista.