«Europa va a pagar MUY caro, como debe ser, y será tu victoria», se jactó el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, ante Donald Trump. De hecho, la alianza imperialista occidental de la OTAN acordó aumentar su gasto en «defensa» al 5 % del PIB durante la próxima década, en su reciente cumbre de La Haya. Los jefes de la industria armamentística europea estaban sin duda encantados.