El Estado mexicano, desde hace años, irrumpe y violenta a comunidades, con el objetivo de saquearlas para beneficiar a una minoría. Hemos visto como en la Ciudad de México, en Oaxaca, el Estado de México o ahora en Campeche, el capital busca cualquier pretexto para desbancar a la clase trabajadora y campesina con el pretexto y la mentira de urbanizar y llevar el progreso económico a estos lugares.