Termina con éxito la gira de la Campaña Manos Fuera de Venezuela en Italia

Acto en el local del PRC en Caserta, 8 de mayo, 2004

La última parte de la gira italiana de la Campaña Manos Fuera de Venezuela nos llevó a Calabria, Sicilia y Roma. El martes 11 de mayo, unas 40 personas, principalmente estudiantes de UNICAL, participaron en un evento en Cosenza organizado por los camaradas de la revista marxista FalceMartello. El debate, de nuevo, se centró en la cuestión de la violencia o no-violencia. Un estudiante preguntó si distribuir armas a la gente no sería peligroso en el sentido de provocar el caos y la violencia generalizada. Jorge Martín respondió que no se trataba de distribuir armas a todo el mundo, sino más bien de crear milicias obreras y populares, organizadas y controladas democráticamente por asambleas revolucionarias en cada fábrica y barrio popular. También hubo una pregunta sobre si los trabajadores serían realmente capaces de gestionar la industria bajo su control, o si necesitarían técnicos y directivos. La respuesta fue que efectivamente los trabajadores son perfectamente capaces de gestionar la economía, como demostraron en la práctica los trabajadores petroleros durante el sabotaje de PDVSA por pare de la contrarrevolución. Es más, PDVSA es una empresa muy desarrollada desde el punto de vista tecnológico, con gran cantidad de procesos controlados por computadora o satélite. En cualquier caso, se necesitarían técnicos e ingenieros, pero en realidad muchos de estos ya colaboraron con los trabajadores en aquel momento, y otros también podrían ser empleados, pero en lugar de recibir las instrucciones de la dirección burocrática, las recibirían de la administración obrera democrática.

Cuando estábamos en Cosenza recibimos la noticia de que el congreso provincial de Caserta de la FIOM (sindicato de trabajadores metalúrgicos), había aprobado una resolución unánime condenando el carácter golpista de los dirigentes de la CTV y llamaba al establecimiento de relaciones con la UNT. También llamaban a discutir esta resolución en las instancias superiores del sindicato, empezando por el congreso regional de la FIOM en Campania.

Después de Calabria, la campaña pasó a Sicilia el miércoles 12 de mayo. Allí tuvimos una reunión por la tarde en Messina con unos 40 asistentes. El evento había sido organizado por la Federación Provincial del PRC que había invitado también a otros oradores. El primero en hablar después de Jorge Martín fue un profesor de la Universidad Estatal de Milán, llamado Pompeiano, que demostró una vez más que un título universitario no es necesariamente garantía de conocimiento. Basicamente afirmó que Chávez era un populista, y que todos los experimentos populistas en América Latina habían acabado en dictaduras sangrientas (¡!). Añadió que Chávez había interferido con la independencia del poder judicial y que eso demostraba sus "tendencias autoritarias”. También advirtió que el “entrenamiento paramilitar de los niños” (¿!¿!) y el hecho de que los cuarteles estuvieran abiertos al pueblo y el ejército realizara tareas sociales en las comunidades eran síntomas de un proceso de “militarización de la sociedad” (¡quizás el profesor Pompeiano prefiere un modelo en el que el ejército dispara contra el pueblo desarmado!). Después de esto, incluso el moderador, Federico Martino, un profesor de la Universidad de Messina y militante de mucho tiempo del Partido Comunista, se vio en la obligación de explicar que la “democracia” en abstracto no significa nada, y que la burguesía en numerosas ocasiones en la historia, cuando ha visto sus intereses amenazados, no ha dudado en recurrir al fascismo, como sucedió en Europa en los años 30. El siguiente en hablar fue el eurodiputado del PRC Giusseppe Di Lello, que había participado en una delegación del parlamento europeo a Venezuela. Di Lello explicó que el problema no era que en Venezuela no habuera democracia, sino que había demasiado impunidad con los crímenes de la oposición antidemocrática, particularmente en relación al golpe de abril del 2002. Describió también un artículo de un periódico opositor en el que se discutía si “asesinar al presidente podía ser legítimo en ciertas circunstancias”(¡!). La conclusión que sacó de su experiencia en Venezuela fue que todas las acusaciones de la oposición respecto a la falta de democracia y los ataques a los medios de comunicación eran falsos, y que para poder defenderse la revolución debía radicalizarse. Di Lello se adhirió a la campaña Manos Fuera de Venezuela y firmó el llamamiento público. Jorge Martín en sus conclusiones también respondió al “argumento” de que la llamada interferencia de Chávez con la independencia del poder judicial, explicando que en realidad, en Venezuela, la inmensa mayoría de los jueces son reaccionarios, y que el Tribunal Superior de Justicia había declarado incluso que en abril del 2002 no había habido un golpe de estado, sino simplemente un “vacío de poder”. Queremos agradecer a la Federación Provincial del PRC de Messina por haber organizado el evento y por un generoso donativo a la campaña.

Al finalizar la reunión nos fuimos rápidamente a Catania, donde el Círculo Marx-Engels del PRC nos había invitado a hablar como parte de un seminario que habían organizado sobre el imperialismo. Cuarenta personas llenaron la pequeña sala de reuniones del “Nievsky” (un bar de izquierdas local) para escuchar la intervención de Jorge Martin sobre Venezuela. Después de la reunión se realizó una cena de recogida de fondos.

Jorge Martin hablando en el acto en Cosenza (11 de mayo 2004)Jorge Martin hablando en el acto en Cosenza (11 de mayo 2004) En el ultimo día de la campaña, fuimos a Roma donde la federación provincial del PRC había organizado un evento. Unas 40 personas participaron en la reunión que tuvo como oradores a Jorge Martín de la Campaña Manos Fuera de Venezuela, Marco Cónsolo del Departamento Internacional del PRC y Mario Mella del Círculo Bolivariano de Roma. Hubo un debate animado, de nuevo sobre la cuestión de la no violencia y sobre si había que radicalizar o no la revolución. Marco Consolo argumentó que no se trataba de armar al pueblo (como había afirmado Chávez) sino más bien de desarmar a los reaccionarios. También advirtió contra el peligro de que revolucionarios desde fuera traten de bajar línea a la revolución y quieran hacer que el proceso avance demasiado rápidamente. Dijo que cada revolución tiene sus propios ritmos que no se deben acelerar artificialmente. Jorge Martín respondió que la necesidad de profundizar la revolución en dirección a la nacionalización de la economía bajo control de los trabajadores, no es algo que haya sido planteado por revolucionarios de fuera de Venezuela, sino que forma parte del programa fundacional de la Unión Nacional de Trabajadores. Es decir, que son los propios trabajadores en Venezuela los que están discutiendo la necesidad de un programa anti-capitalista como única manera de luchar contra el imperialismo. Jorge añadió que el principal peligro al que se enfrentaba la revolución no era el de la aceleración “artificial” de los ritmos, sino más bien el sentimiento de las masas de que la revolución iba demasiado lentamente. También en Roma fuimos entrevistados por Radio Citta Aperta.

En el transcurso del viaje, también tuvimos una reunión con Pino Rea que es el presidente del sindicato de periodistas (FNSI) en Toscana. Rea ha elaborado un excelente informe sobre la situación de los medios de comunicación en Venezuela que se llama “Lucha de Clases en la Redacción” que se puede leer en la página del sindicato (http://xoomer.virgilio.it/felix2004/). En el informe él argumenta que el conflicto real no es tanto sobre la libertad de los medios, sino más bien sobre el derecho a la información, visto que todos los medios privados en Venezuela están dominados por la oposición.

El audio completo del excelente acto de Bologna se puede encontrar en la web: http://www.acabnews.it/view/2618 junto a una entrevista con Jorge Martín sobre la detención de los paramilitares colombianos en Venezuela: http://www.acabnews.it/view/2651

En resumen, los resultados de la gira fueron excelentes, con más de 1150 personas en 20 eventos. También se consiguieron unos 4.600 euros, aunque siguen llegando más donativos, y se vendieron unos 250 ejemplares de El Topo Obrero, el periódico de la Corriente Marxista Revolucionaria en Venezuela. La gira también ha servido para sentar las bases para un trabajo de solidaridad dentro de los sindicatos, particularmente el de metalúrgicos, y para discutir el reconocimiento de la UNT como la representante legítima de los trabajadores venezolanos, en lugar de la burocracia ilegítima de la vieja y moribunda CTV.

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