El 21 de noviembre está previsto el comienzo del Congreso Nacional del PSUV. Mientras que la burocracia reformista está esperando tener un congreso que pase sin demasiada oposición, por todo el país la izquierda está presentando candidatos para delegados, entre los cuales nos encontramos los marxistas. El congreso ofrece una oportunidad para llevar las ideas del socialismo revolucionario a una capa amplia de las bases del partido. Lo que tiene que hacer el PSUV es adoptar un programa genuinamente revolucionario para terminar con el capitalismo, el latifundismo y el imperialismo en Venezuela.
Desde la publicación de nuestro último artículo (Se ha anunciado el congreso del PSUV para noviembre), anunciando la celebración del Congreso Nacional del PSUV, varios acontecimientos importantes han tenido lugar en el partido. En el momento de escribir, los candidatos en cada municipio están haciendo campaña para ganar el apoyo de los 2,5 millones de patrulleros, es decir, los miembros activos del PSUV, que tengan derecho a votar en la elección de delegados el próximo domingo.
Las bases luchan por la democracia interna
Como mencionamos en nuestro artículo anterior, el método de elección de los delegados para el congreso, donde cada vicepresidente regional del partido escoge los candidatos, ha dado lugar a serias inquietudes entre los sectores del ala izquierda del partido. Esta preocupación se confirmó cuando aparecieron las listas de candidatos. En algunos estados, las patrullas se quejaron de que los candidatos que habían postulado no figuraban en los listados. En el estado Bolívar, este fue el caso con conocidos candidatos de izquierda como Yasmin Chaurán de la fábrica de Venalum y José Meléndez de la acería SIDOR. Ambos tenían el apoyo de más de 10 patrullas cada uno y no obstante fueron excluídos de la lista electoral.
En Caracas, los voceros de las patrullas se reunieron el 23 de octubre para revisar lo que ellos consideraban como normativas "no democráticas" en el proceso electoral. Después de un debate largo y acalorado, votaron a favor de revocar la Comisión Electoral designada por el vicepresidente regional, encargado de supervisar las elecciones. El problema era que esta Comisión Electoral se había formado desde la parte superior e incluyó algunos candidatos para las elecciones que se suponía que debían supervisar. La asamblea eligió a cinco nuevos representantes de las bases y el organizador regional del PSUV, Freddy Bernal, tuvo que aceptar esta decisión y la reestructuración de la Comisión.
Según un informe de Venezuelanalysis (Venezuela: Disputes in Process of Delegate Nominations to PSUV Congress), otros incidentes similares ocurrieron en toda Venezuela:
“En el estado Carabobo, surgieron reportes de problemas con el proceso de nominaciones a través de la página web del PSUV, como la ‘clonación’ de las patrullas, que implicó la usurpación de los números de tarjetas de identidad de los responsables del registro de las candidaturas y hacer nombramientos falsos, lo que deshabilita el número de la tarjeta del representante de la patrulla.
Además, algunas de las patrullas no se han registrado en el sitio web, a pesar de pasar por el proceso adecuado de presentar la documentación a los órganos de dirección regional para el registro, y en consecuencia no pudieron nombrar a sus candidatos.
Durante su discurso de Chávez criticó las ‘irregularidades’ que se produjeron en algunos estados, así como lo que describió como ‘problemas de comunicación’ dentro del partido. ‘Es necesario asegurarse de que la información llega a todo el mundo’, dijo”.
Chávez: Las corrientes son un fenómeno natural
El presidente Chávez dijo en Aló Presidente del domingo 25 de octubre, que 8.000 miembros del PSUV han sido seleccionados como candidatos para las próximas elecciones.
Sobre la cuestión de las tendencias dentro del partido, Chávez declaró, “que son naturales y es necesario para permitir su expresión dentro del partido y para discutir ideas y, a continuación, con mucha disciplina, aceptar las decisiones estratégicas resultante”.
“Es válido que haya visiones diferentes, pero en el marco del proyecto socialista. Lo que buscamos es que tales conflictos no se conviertan en una pelea a cuchillo o una confrontación, esto es lo que le pido a todos y creo que el partido está madurando en ese sentido”, añadió.
Esta es una declaración muy importante que debería ser de tomada con ambas manos por los sectores de izquierda del PSUV. El hecho de que Chávez abre un amplio debate es fundamental porque da a los revolucionarios una oportunidad de exponer sus puntos de vista dentro del partido y luchar por la mayoría.
En palabras de Lenin, nuestra tarea es “explicar pacientemente” las ideas del marxismo revolucionario en un lenguaje que puede conectar con las capas más avanzadas en la vanguardia del partido que estén buscando una salida al estancamiento actual.
La izquierda dentro del PSUV necesita organizarse
La CMR – sección venezolana de la Corriente Marxista Internacional – está interviniendo con una fuerza modesta pero importante en el partido. A lo largo del país, los camaradas de la CMR están presentando candidatos en las elecciones de delegados del domingo. Sólo para mencionar algunos ejemplos, en el estado Bolívar, en el municipio de Caroní, Puerto Ordaz, dos trabajadores de SIDOR, José López y Augusto Monasterios, están haciendo campaña con un programa marxista. En el estado Táchira, tenemos a Freddy Acevedo, un líder regional del partido muy conocido que se presenta como candidato en el municipio de Independencia. En Guaicaipuro, estado Miranda, se presenta Euler Calzadilla, que es un activista de la Juventud del PSUV.
En algunas zonas se han adoptado medidas importantes para formar alianzas más amplias de la izquierda. Este es, por ejemplo, el caso de Caroní, Guayana, donde catorce delegados del ala izquierda han hecho una lista conjunta y presentan un programa con puntos de acuerdo común. Esto muestra el camino a seguir. La razón principal por la que la burocracia derechista ha sido capaz de dominar gran parte del partido es que está muy bien organizada, mientras que la izquierda no lo está.
El documento de CMR, Por un PSUV de la clase obrera y el pueblo: Fortalecer el PSUV, reimpulsarlo con el Marxismo. Tomar el poder en fábricas, comunidades y el campo para construir el Estado obrero y comunal es una herramienta muy útil en este sentido. Es una propuesta que puede ser discutida en círculos más amplios entre los patrulleros de la izquierda del PSUV que están buscando una alternativa a la derecha. Ya en la actualidad el documento ha encontrado un eco importante entre varios candidatos que lo utilizan como su plataforma política en las elecciones.
El domingo, las elecciones tendrán lugar en todo el país. La burocracia ha realizado una ardua labor para promover a sus candidatos, muchos de ellos vinculados a los gobernadores y alcaldes. Pero la izquierda tendrá también la posibilidad de ganar al menos una parte de los 772 delegados. Sin embargo, es importante subrayar que la lucha no termina el domingo. El ala izquierda que ha ido forjandose con alianzas a nivel regional, se debe continuar y ampliarse. Deben ser formados con una estructura permanente y democrática que permite una lucha conjunta en un programa acordado de reinvindicaciones. Ello debería hacerse extensivo a nivel nacional.
Según Aristóbulo Istúriz, Vice-presidente por la región del nordeste del PSUV, el congreso tendrá lugar “en todo el país al mismo tiempo”. Y añadió: “Los delegados deberán recoger las propuestas de las patrullas, luego viajarán a Caracas el jueves y el viernes y el domingo, y cuando participen en las sesiones plenarias y en los talleres para cada tema, cada delegado podrá decir cuáles son las propuestas y la posición de la Patrulla en su municipio”.
Una vez más, las bases deben agarrar esta idea con ambas manos. Las patrullas deben asegurarse que esto se lleva a cabo en la práctica y debe exigir que las asambleas se realicen para preparar cada sesión plenaria y así garantizar que las bases tengan una influencia real en los asuntos a discusión.
A pesar de las maniobras burocráticas y las “irregularidades” en el proceso electoral, el profundo descontento con la falta de una acción decisiva por parte de la revolución, encontrará su reflejo en el congreso. Las masas empujarán para impulsar un programa de acción que pueda completar la revolución socialista en Venezuela. Ya han tenido suficientes discursos interminables, desfiles y elecciones sin ningún tipo de medidas decisivas adoptadas para derrotar a la contrarrevolución y avanzar hacia el socialismo. Esta sigue siendo la principal contradicción de la revolución venezolana y del propio PSUV.