En 1965, India y Pakistán entraron en guerra por Cachemira. El conflicto, que duró 17 días, se saldó con miles de muertos y la victoria de la clase dominante india. Sin embargo, no logró resolver ninguno de los problemas subyacentes y, en particular, la cuestión del estado ocupado y dividido de Cachemira. En las décadas transcurridas desde entonces, estas fricciones han llevado a India y Pakistán a la guerra una y otra vez.