En el momento de publicar este artículo se ha informado en los medios de comunicación que ya han sido liberados todos los estudiantes presos, esto representa un triunfo del movimiento, sin embargo consideramos que la lucha debe seguir por la defensa de las normales rurales, la educación pública en general, la defensa de los derechos laborales y en contra de la represión.
El contexto general
La coyuntura en el sector estudiantil está dando muestras de que la juventud está en un proceso de lucha que va pasando desde la defensa de una democracia hasta la lucha por el mejoramiento de donde pasan buena parte de su vida que son sus escuelas.
El movimiento #YoSoy132 ha marcado una línea entre un antes y un después, con el Morenaje ya se daban semblanzas de que la juventud está interesada en tomar en sus manos la necesidad de organizarse; aunque fue un movimiento de repercusión nacional no tuvo el impacto que tuvo el #YoSoy132 que después de todas sus peculiaridades, espontaneidad, errores, fue capaz de movilizar a cientos de miles de jóvenes, aunque su falta de claridad y dirección lo ha llevado a no dar continuidad en la lucha o a no hacerlo con la misma fuerza de meses atrás.
Por su puesto, después de la lucha electoral y contra la imposición, una capa de jóvenes no ha vuelto desmoralizado a sus casas sino más bien ha vuelto a sus centros escolares a dar la batalla por mejorar sus condiciones como estudiante, a democratizar la elección de autoridades; en general, a dar la lucha a una escala local pero no menos importante por una educación mejor, científica y capaz de asegurarle un futuro no más deteriorado de lo que es el presente con falta de empleo, violencia al por mayor e incluso falta de escuelas para muchos.
Las luchas en las escuelas se notan de forma muy importante en la UACM, en el IPN y en las últimas semanas el caso de Michoacán es lo que muestra de forma clara la represión y la incapacidad del gobierno, incluso la falta de interés por resolver las demandas estudiantiles.
Michoacán: un gobierno represor e incapaz, un gobierno priista
Desde el 28 de abril de este año ya se daban indicios de la “nueva” cara del priismo en Michoacán cuando se da un “violento desalojo policiaco efectuado la madrugada de (esa fecha) en tres casas de estudiantes de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (Nicolaíta, 2 de Octubre y Lucio Cabañas) cuyos integrantes demandan apoyos para transporte, combustible y viáticos para promover los albergues universitarios en la entidad “(La Jornada 29-04-2012).
El 4 de septiembre son ocupadas los diversos campus de la Universidad, que con el pretexto de las autoridades de que no aprobaron el examen de admisión, demandan su legítimo derecho de ingreso a la universidad. Integrantes de la Coordinadora de Universitarios en Lucha (CUL) tomaron la mañana de (esa fecha) todas las instalaciones de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) en apoyo a los más de 2 mil rechazados. (La Jornada 5-09-2012).
Por supuesto la respuesta no iba a ser una palmada en la mano y después de argumentar el rector que no iba negociar bajo presión, llegaron las amenazas de expulsión para los participantes en las tomas de las instalaciones. Si bien tenemos diferencias de métodos con los compañeros de la CUL pues no nos parece lo mas adecuado el tomar las instalaciones universitarias sin el apoyo o simpatía del conjunto de la comunidad y sin siquiera informar a los estudiantes que no son de las casas de estudiante las razones de la lucha y solicitar su apoyo, a pesar de esto no se justifica en nada el levantamiento del paro de forma violenta.
Días después se da un enfrentamiento entre estudiantes que recuperaron algunas escuelas, y al final con la misma táctica se recuperaron todas, contra los que tenían tomadas las instalaciones. Esto al parecer no es algo único en las tomas de escuelas cuando se repite constantemente que los que deciden tomar escuelas no ganan la conciencia de los demás o incluso gente provocadora dispuesta romper los paros lo consigue frente a la falta de una organización sólida o la debilidad de los paristas en número o en forma de explicar las razones de la lucha y los métodos.
Pero el caso más reciente empieza a inicios de octubre cuando “Alumnos de las escuelas normales de Tiripetío y Cherán mantienen en su poder 20 autobuses y 18 camiones repartidores de mercancías como parte de las manifestaciones que efectúan para demandar la postergación de la reforma al plan de estudio de las escuelas formadoras de maestros” (La Jornada 6-10-2012).
Esta vez la demanda es que se postergue un año una reforma curricular que está fuera de la realidad del estado, ya que por ejemplo, contempla el uso de la computación en comunidades indígenas, sin contar con los medios materiales para ello. En el fondo es otra reforma que pretende que rija el modelo por competencias, por cierto que en otras escuelas ya se ha dado la lucha como en el IPN por el hecho de que en este modelo lo único que busca no es desarrollar estudiantes críticos sino mano de obra barata, y de la mano de reformas como la laboral, los únicos intereses que responde son los de los empresarios; por último, qué hay de que no todas las comunidades ni personas tienen acceso a una computadora.
Un paso adelante en esta lucha ha sido la intensión de vinculación con el magisterio, el sector mejor organizado de la clase obrera de la entidad, y juntos dar la lucha contra la reforma laboral.
Para el día 9 de octubre se anuncia que policías federales iban a llegar a Michoacán para recuperar los vehículos retenidos por los estudiantes de Tiripetío, Arteaga y Cherán.
La violencia es lo único que parece conocer las autoridades
La madrugada del 16 de octubre la policía desaloja violentamente a 176 estudiantes que ocupaban las escuelas normales de Tiripetío, Cherán y Arteaga.
Los estudiantes tenían retenidos más de noventa vehículos e incendiaron trece. Las acciones de los jóvenes se explican por la desesperación de que la represión caerá tarde o temprano contra ellos, sin embargo, el gobierno muestra su incapacidad una y otra vez de dialogar y remediar las demandas estudiantiles. También es claro que la propia policía incendio algunos camiones para justificar la represión.
Los medios de comunicación muestran a los estudiantes y maestros de Michoacán como medievales que se oponen a cualquier tipo de progreso. Desde nuestro punto de vista es correcto el estudio de inglés y computación, pero también el de las lenguas indígenas y la preservación de las tradiciones de las comunidades. Lo que no estamos de acuerdo es que se use de pretexto esas reformas para golpear a la organización de los estudiantes y trabajadores, lo cual es el principal objetivo. Los capitalistas se quejan por la quema de algunos autobuses pero eso no es nada comparado con la represión que sufren los normalistas y el intento de desaparecer cada una de las normales rurales del país. En Ayotcinapan, Guerrero, fueron asesinados 2 estudiantes en una protesta por parte de la policía en diciembre pasado. La Normal del Mexe, Hidalgo, después de cruentas batallas fue cerrada por el estado. Eso es lo que buscan, desmantelar la organización de los estudiantes normalistas y del magisterio democrático bajo la falsa bandera del progreso educativo.
La CNTE se ha solidarizado y ha promovido acciones, iniciando por el paro indefinido de labores a nivel estatal, para ejercer presión de que se liberen a todos los presos que hasta el cierre de este artículo ocho fueron consignados y recluidos en el Centro de Rehabilitación Social (Cereso) Francisco J. Múgica. Acusados por el incendio de 13 autobuses, camiones de reparto y vehículos oficiales, podrían enfrentar penas de entre cinco y 10 años de prisión.
• Libertad inmediata a todos los presos normalistas
• Presentación inmediata a de los desaparecidos
• Solución a las demandas de los compañeros de las normales de Michoacán y a todas las del país
• Destitución de Fausto Vallejo (gobernador), Jesús Reyna García (Secretario de Gobierno), Elías Álvarez Hernández (Secretario de Seguridad Pública del estado).
Hacemos propias estas demandas y desde nuestras trincheras lucharemos por su cumplimiento.
¡Viva la lucha de los estudiantes y trabajadores michoacanos!
Source: La Izquierda Socialista (Mexico)