Las elecciones presidenciales de este año son muy importantes para los trabajadores de nuestro país. Hay dos planteamientos en pugna, por un lado seguir manteniendo el estado de cosas actuales e incluso profundizar el desastre de la supuesta guerra contra el narco, la pobreza, el desempleo, etc. y por el otro lado poder frenar este proceso de espiral descendente al que nos han empujado los gobiernos del PRI y el PAN.
La oferta del PRI-AN a los trabajadores
Sabemos por experiencia que en épocas electorales todos los candidatos de los diferentes partidos suelen ofrecer la luna y las estrellas a los trabajadores y sus familias. Como dice el dicho “prometer no empobrece”. El fin último es conseguir llegar al gobierno por métodos supuestamente democráticos –y cuando no se puede está el recurso del fraude electoral– para aplicar su verdadero programa, no el que gritaron en las 4 esquinas de su campaña, sino el de los empresarios y el imperialismo.
En esta ocasión los candidatos a la presidencia por parte de los partidos de la burguesía, el PRI y el PAN, los vemos ofrecer más seguridad, crecimiento económico, mano firme contra la delincuencia, etc. Sin embargo omiten que ellos y sus partidos fueron lo que impulsaron las políticas para tenernos en este callejón sin salida. Cómo esperar que los causantes de la actual situación puedan resolverla sobre todo cuando no están interesados en solucionar los grandes problemas que nos aquejan, lejos de eso toda su política es para incrementarlos y seguir dando rienda suelta a este festín de dinero a los grandes bancos y empresas nacionales e internacionales que se ven favorecidos por estas políticas.
Los que impulsan a estos dos partidos son la oligarquía nacional, esas 30 familias que controlan las riendas y destinos de este país, también están inmiscuidos el gobierno de los EEUU que apoyan a cualquiera de los dos candidatos, antes que Andrés Manuel pueda llegar a la presidencia. Los empresarios, los burócratas, los dirigentes sindicales charros, etc. Toda esta escoria es la que impulsa al PRI-AN. Todo lo viejo, lo podrido se une para mantener este régimen de explotación.
El PRI y su candidato “el guapo”
Enrique Peña Nieto es el gallo de la burguesía nacional e internacional. Su campaña está orientada a mantener el “voto duro”, es decir corporativo, en todos los estados donde gobierna el PRI por medio de amenazas, golpeadores y compra descarada de votos. La otra parte de la campaña es tratar de captar a la gente que está decepcionada del gobierno del PAN, no es casualidad que todos sus comerciales se están planteando como alternativa a la bancarrota del gobierno en estados donde el PAN gobierna o tiene alguna influencia.
Este candidato representa lo peor del PRI: la corrupción, el acarreo, la represión, etc. Como hemos podido ver es una persona acostumbrada a que lo mimen los monopolios televisivos, cuando esto no se da se ve claramente su estupidez.
Lo que ha representado el PRI para nosotros los trabajadores y la juventud ha sido desastroso, en más de 70 años el PRI asesinó a dirigentes sindicales y la juventud revolucionaria, organizó y maniató a los trabajadores al Estado y reforzó el charrismo sindical para impedir la lucha obrera, privatizó las empresas estatales, etc. Este es el PRI que quiere regresar al gobierno.
“La jefa” y su campaña chapucera
Por el lado del PAN, el inicio de la campaña de la jefa, Josefina Vázquez Mota, ha sido desastrosa, error tras error ha planteado. Entre los dirigentes del partido incluso se planteo una posibilidad de cambiar a su candidato, después del desmayo que la “jefa” sufrió en una de las presentaciones de campaña.
Han sido tan absurdos los errores que incluso en varios medios de comunicación se ha manejado que estos no han sido accidentales y que tienen como fin, en un momento determinado, dejarle el camino libre a Peña Nieto. Aunque esta suposición es poco probable.
El PAN tiene una base dura que no estaría de acuerdo en renuncias a favor del PRI. La campaña de Vázquez Mota no va a tener una segunda parte, es decir no va a mejorar puesto que los errores no sólo son eso, sino un síntoma de la bancarrota del gobierno y del partido panista.
Los dos gobiernos del PAN han significado un ataque sin precedente para los derechos de los trabajadores, se han desaparecido sindicatos, destrozado los niveles de vida e intentado la modificación a las leyes laborables una y otra vez.
Acción Nacional ha aplicado el programa de la burguesía sin contemplaciones y ambigüedades, para eso inició una guerra contra el narco que ahora ha dejado más de 60 mil muertos, 20 mil desaparecidos y más de medio millón de desplazados de guerra. No ha dudado en hundir al país en un proceso de descomposición social sin precedente.
La candidatura de AMLO y las tareas de los trabajadores
El lado opuesto o la alternativa que ahora hay frente a nuestros ojos es la candidatura de AMLO. Es el único de los candidatos que ha planteado un programa que intenta revertir el desastre en que nos encontramos.
Los planteamientos de AMLO van desde lo más básico como lo es el incrementar el salario mínimo, la democracia sindical, educación para toda la juventud, seguro de desempleo, etc. Además se ha opuesto firmemente a que se siga privatizando los recursos energéticos y naturales de nuestro país.
En suma podemos decir que lo que se propone desde la izquierda es poder reivindicar algo de lo mucho que nos han quitado. Es cierto que la política de Andrés Manuel no plantea terminar de tajo con la explotación del hombre por el hombre, con el capitalismo. No rompe de raíz la contradicción fundamental de esta sociedad capitalista, el conflicto capital trabajo. Mientras que siga existiendo propiedad privada en los medios de producción, las grandes empresas, los grandes bancos y a tierra, los trabajadores no podremos gozar de una verdadera posibilidad de ser hombres plenamente libres e íntegros.
Lo que plantea AMLO es positivo en el sentido que impulsa la organización de nuestro pueblo para frenar este proceso de descomposición social que ahora vivimos, sin embargo, sin nacionalizar la banca, las grandes industrias y llevando adelante un reparto agrario no va a ver una verdadera salida o una salida duradera a nuestros problemas.
Es por esto que nuestra participación en la campaña electoral de nosotros como trabajadores y como juventud no solo es votar. Tenemos que ir a las urnas y votar por AMLO, pero al mismo tiempo tenemos que participar en la formación del Morena (Movimiento de Regeneración Nacional) y desde los comités de base hacer presión para que se cumplan las verdaderas demandas de los trabajadores e impulsar un programa de clase, un programa socialista.
Para cerrarle el paso a oportunistas que ven en nuestro movimiento la posibilidad de acceder a una vida cómoda a partir de los buenos sueldos de los diputados, etc. desde el Morena podemos y debemos de impulsar una campaña militante en los barrios, en las fábricas, en las escuelas; construir un Morena democrático y con una vida activa en las bases para cerrarle el paso a los arribistas y burócratas.
Tenemos que explicar a nuestros camaradas que no da igual el hecho de votar o no hacerlo, un voto nulo o que no se ejerce es un voto menos para la izquierda. Al mismo tiempo tenemos que insistir que no sólo queremos que AMLO sea el presidente del país, queremos que gobierne para nosotros los trabajadores y la juventud, no para la oligarquía o la pequeña burguesía.
Esto sólo se logrará organizándonos, como ya lo mencionamos, de forma activa en el Morena y hagamos que la campaña electoral sea un movimiento que defienda las causas de los sectores en lucha, que implique una alternativa clara sobre nuestro futuro.
Nosotros los trabajadores y la juventud tenemos mucho que decir y hacer, la solución a nuestros problemas (, el hambre, la pobreza, la falta de empleo, falta de educación, etc.) está en nuestras manos, no atajándolos de forma personal sino colectiva. No son problemas personales de cada uno, son problemas sociales que se resuelven sólo haciendo que un gobierno de y para los trabajadores ejerza el control de toda la riqueza que hemos creado, y ésta sea disfrutada por los creadores de la misma, no por parásitos que lo único que hacen es sangran nuestra vida.
¡Ni un voto al PRI-AN!
¡Votemos por AMLO y luchemos por un programa socialista!
¡Fortalezcamos la organización sindical y el Morena!
Source: La Izquierda Socialista (Mexico)