El viernes 2 de agosto hicimos público lo que hemos venido haciendo desde hace meses: el estudio consciente y consecuente de las ideas de Marx, Lenin y Trotsky. La actividad “inaugural” fue una charla preparada por el camarada suizo Caspar Oertli, en la que esbozó grosso modo la crisis socio-política y económica que padece el viejo continente, la cuestión de SIRYZA en Grecia y el papel de la CMI a nivel internacional.

La entrada de la iglesia cristiana CEB (Comunidad Eclesial de Base) San Pablo Apóstol fue el lugar donde se desarrolló la actividad. En la puerta principal de la iglesia, ondeaba la Bandera Comunista. La hoz y el martillo a la entrada de una iglesia de base nicaragüense –cabe destacar que las CEB, seguidoras de la Teoría de la Liberación, fueron un bastión en la lucha insurreccional sandinista desde mucho antes del triunfo de la revolución en Julio de 1979-. Muchos de los integrantes de esa comunidad asistieron a la charla, y en cada uno de sus rostros, al ver la bandera, se dibujaba una gran sonrisa, en señal de aprobación y de celebración. Alrededor de 20 personas nos encontrábamos reunidos. Desde economistas, pasando por arquitectos, trabajadores sociales, integrantes de la Juventud Sandinista 19 de Julio, hasta exsacerdotes fueron el público y plenario de la actividad.

“Nosotros los latinoamericanos  no ‘sentimos’ la crisis, porque desde siempre hemos vivido en crisis” afirmaba Yamil Ríos, trabajador social, al inicio de su participación en el debate.

Nos sorprendemos por la situación que pasa Europa, nos asustamos por las deficientes condiciones de vida que padecen los griegos, pero nuestras condiciones son aún más precarias y lo son desde hace siglos. ¿No es acaso sorprendente el nivel de alienación que tenemos los latinoamericanos al perder el sueño por lo que pasa en Europa mientras apartamos la vista a lo que sucede aquí, donde podemos hacer algo?

Por otro lado, si bien es cierto que los programas del gobierno sandinista han reducido los niveles de pobreza, el analfabetismo y la exclusión, también es cierto que no se ha preocupado por profundizar la revolución. El nivel de conciencia de varios militantes del partido de gobierno es en extremo deficiente llegando algunos hasta el punto de afirmar que el estudio del marxismo es “ilógico”. “Me ha sorprendido que muchos miembros de juventud sandinista han afirmado que el estudio de marxismo es ilógico. Eso para mí es una de las mayores estupideces que he escuchado en mi vida. Alguien que se dice de izquierda no puede afirmar eso, porque está negando la lucha de clases, la hegemonía del capitalismo y la misma revolución”. Afirmaría Rafael Valdez, economista y miembro de la CEB San Pablo Apóstol, ante esta situación.

“Los niveles de pobreza, manejados nada más por los ‘burócratas de los números’ ha ido cambiando”, afirmaba  Félix Jiménez, exsacerdote español, debido a que Nicaragua es considerado el segundo país más pobre de Latinoamérica, agregando luego: “Si se capitalizara la movilización de las masas –que en el gobierno sandinista es algo impresionante- se podría llegar muy lejos.”

El debate se prolongó más de 2 horas, incluso los miembros de la CEB, en la celebración dominical siguieron debatiendo al respecto. La actividad ayudó a consolidar más nuestro grupo y abrió puentes con los asistentes, puesto que varios se comprometieron a participar activamente en la misma.

¡Viva Nicaragua Libre!

¡Proletarios de todos los países, uníos!

¡Patria Libre o Morir!