El intento de la clase dominante para aterrorizar a las masas trabajadoras ha aumentado. La mayoría de ésta aparece decidida a tratar de marginar a su enemigo político. Los "medios", sirvientes de las grandes empresas, difunden diariamente propaganda típica de una guerra civil. El periódico marxista, Revolución, es el último objetivo, al ser atacado públicamente por el diputado de Nueva Democracia, Papathanasiou.
En la guerra sucia de propaganda de la clase dominante, SYRIZA es presentado como un "gran peligro nacional". Se argumenta que si SYRIZA es elegido para el gobierno, entonces Grecia volverá automáticamente al Dracma (los señores Samaras y Venizelos repitieron esto en sus últimas declaraciones), el país se sumirá en el caos con bandas de inmigrantes asaltando las ciudades (declaración del Sr. Chrysohoides) y estallará una guerra civil (declaración del director del diario Kathimerini, el Sr. Alexis Papahelas).
Las mismas personas que la semana pasada, como delincuentes políticos comunes, estaban invitando a SYRIZA a entrar en un gobierno de coalición, o a que votara a favor de uno para "negociar el Memorándum", ahora le declaran públicamente la guerra por las supuestas tendencias "peligrosas para la nación" que existen en el partido. Es un gran honor para nosotros que, en esta guerra de propaganda de la clase dominante, sea destacado de manera prominente desde el jueves de esta semana, el periódico de los marxistas de Synaspismos y de SYRIZA, Revolución.
En la última emisión nocturna del canal de televisión NET titulado "Elecciones 2012", la discusión se calentó, como es habitual en estos días. El diputado que representaba a SYRIZA en el panel, el compañero Zoi Konstantopoulou, fue atacado por los representantes de Nueva Democracia (ND), del PASOK y de la Izquierda Democrática (DIMAR). Un representante del partido demagógico burgués Griegos Independientes, el conocido abogado Sr. Kapernaros, una vez más trató de aprovechar el prestigio político de SYRIZA diciendo que "su partido estaba abierto a colaboraciones con todas las fuerzas anti-memorándum" (queriendo decir SYRIZA). Este fue el momento para un ataque sucio. El ex Ministro de Hacienda y diputado por ND, el Sr. Papathanasiou, desde una carpeta que recibió de la oficina de prensa de su partido, sacó un ejemplar del periódico Revolución y se dirigió al Sr. Kapernaros. Le preguntó, retóricamente: "¿Sabe usted con quién va a cooperar? ¡Se lo diré ahora mismo!" Entonces comenzó a leer extractos de las posiciones del periódico con la mirada de un juez militar: "Derogación de la fuerzas represivas del Estado y su sustitución por una milicia popular, que estaría bajo el control de las organizaciones de masas de los trabajadores". "Estas no son mis posiciones", continuó el ex-ministro. "Los miembros de SYRIZA que publican el periódico Revolución, escribieron estas cosas en su periódico". Hubo agitación en el panel, hasta que el moderador del programa se apresuró a declarar que "obviamente esto no es la posición oficial de SYRIZA, sino los puntos de vista de una de las tendencias de la misma".
El equipo editorial de la Revolución da la bienvenida públicamente a la atención del Sr. Papathanassiou y lo toma como un cumplido. El equipo de redacción reconoce el interés cada vez mayor, el miedo y la ansiedad de la clase dominante de las ideas y del programa de los marxistas, que son una parte integral y orgánica de SYRIZA. Los representantes políticos de los bancos, de los armadores navales y de los otros parásitos del Capital tienen muchas razones para temer y preocuparse por las ideas y las posiciones de los marxistas. Los que no tienen razón para preocuparse son la gente común a quien se dirige esta propaganda negra de la clase dominante. Sólo la clase obrera y las masas pobres pueden beneficiarse de las ideas y del programa del marxismo, incluyendo, en particular, las capas pequeño-burguesas de las ciudades y de los pueblos.
Es necesario recordar aquí que a través de sus luchas en los últimos dos años, las grandes masas han hecho indiscutiblemente dos demandas centrales: condiciones de vida dignas y democracia verdadera.
En cuanto a la primera demanda, el Sr. Papathanassiou y sus colegas, han demostrado durante décadas que sólo pueden ofrecer pobreza masiva y desempleo. El verdadero terror de la gente no proviene de los marxistas, sino de la anarquía del mercado capitalista. El programa del marxismo es el único que puede garantizar una vida digna y trabajo para todos, a través de una economía planificada y centralizada democráticamente. Especialmente para la pequeña burguesía de la ciudad y del campo, un economía planificada democráticamente puede aliviarla de los impuestos insostenibles, prohibiendo la deuda usuraria, otorgarle créditos baratos y liberarla de la especulación de los intermediarios.
Personas como el Sr. Papathanasiou tampoco tienen respuesta a la demanda de democracia. Estos políticos son los defensores de la esclavitud a la Troika y a sus comisarios, y ellos son los jefes políticos de la policía antidisturbios asesina que inició una guerra química contra el pueblo. La reacción histérica del ex-ministro a nuestra demanda de control democrático, por las organizaciones de masas de los trabajadores, de las instituciones encargadas del orden público, pone de manifiesto el carácter profundamente autoritario de su clase. Vamos a recordarle que la demanda de una milicia popular fue una exigencia de su propia clase en el momento de su juventud histórica, colocada en un lugar destacado en el programa de las grandes revoluciones burguesas con el fin de luchar contra las instituciones opresivas del absolutismo feudal. Pero los tiempos han cambiado - especialmente en Grecia, con su capitalismo atrasado y sus tradiciones comunistas, revolucionarias y heroicas. Hoy en día, la clase del Sr. Papathanasiou necesita todo un ejército de informantes y mercenarios sádicos blindados con el fin de mantenerse en el poder.
Cualquier trabajador común y honesto puede entender cuál es el peligro real. La elección es entre las fuerzas mercenarias de represión del pueblo, como defiende cualquier señor Papathanassiou; y las milicias, organismos compuestos por trabajadores que luchan, como defienden los marxistas. Especialmente para aquellos que inhalaron toneladas de productos químicos asfixiantes en la Plaza Syntagma en los últimos dos años, pensamos que la elección no será difícil en absoluto.
Por lo tanto, Sr. Papathanasiou, continúe la sucia guerra de propaganda con sus colegas. Nosotros, los marxistas, y las decenas de miles de activistas de SYRIZA y de la izquierda, no tenemos miedo. Estamos preparados para los juicios públicos que ustedes están organizando para juzgarnos. Les damos la bienvenida, porque nos permitirá explicar nuestras ideas y ganar, a través de ellos, a más y más personas que sufren bajo la bota de vuestro poder.
En esta guerra, nosotros, los rebeldes marxistas, tenemos con nosotros la marea de la historia y el juicio honesto e infalible de millones de trabajadores. El tiempo de su odio y de su venganza legal se acerca, y marginará vuestros trucos de sucia propaganda, y llevaremos a cabo nuestro programa, el programa de la revolución que tanto lo asusta.
Stamatis Karayannopoulos - editor del periódico Revolución y de la revista Voz Marxista
Traduccion: El Militante (Argentina)