El escándalo por la leche contaminada en China sigue extendiéndose. De dos han pasado a cuatro los niños muertos y algunas noticias hablan de seis. Cuando el escándalo estalló el gobierno tuvo que intervenir y ordenó una investigación nacional de todas las leches en polvo infantiles. La investigación oficial ha encontrado que el 20 por ciento de las empresas lácteas chinas están implicadas. El Grupo Sanlu hay estado distribuyendo leche que contiene melamina, un producto químico que puede hacer que el nivel proteico de los productos lácteos parezca mayor del que realmente es.
Por ahora han muerto dos niños y 50.000 están enfermos, algunos han desarrollado problemas renales. El responsable de la empresa Sanlu fue despedido pero ¿cuántas cabezas tendrán que rodar próximamente?
En la investigación inicial se analizaron 109 empresas lácteas, de ellas 22 vendían leche con melamina. Even Yili, que suministró la leche para los Juegos Olímpicos de Pekín, es una de las implicadas en el escándalo, junto con otras muchas más.
Según publicaba Chinanews.com, el presidente de Sanlu "tenía una gran responsabilidad" en lo ocurrido. ¿Pero cómo se puede culpar de todo esto a una sola persona? Desde marzo, los padres se han estado quejando a la empresa de la orina descolorida de sus bebés. En realidad, se ha descubierto que Sanlu era consciente del problema de la melamina desde el pasado mes de diciembre. ¿Por qué no hizo nada entonces? Algunos niños en marzo ya fueron admitidos en el hospital, así que los directores de la empresa no pueden alegar ignorancia.
El Grupo Sanlu ha intentado descargar toda la responsabilidad sobre los pequeños granjeros que suministran la leche. Según la agencia de noticias Xinhua, varios han sido detenidos, uno de ellos producía 3 toneladas de leche diarias contaminadas con melamina. El 17 de septiembre, fueron detenidas 22 personas sospechosas de utilizar el producto tóxico.
Si una investigación inicial ha encontrado la implicación de 22 empresas junto con la implicación de los pequeños comerciantes en esta práctica de añadir un producto tóxico a la leche en polvo, entonces el problema no es de una sola empresa o de un solo alto ejecutivo. No sólo la industria láctea se ha visto afectada en el último período por escándalos de este tipo. En 2004 murieron al menos 13 bebés después de beber leche en polvo adulterada, otras empresas de alimentación también han estado implicadas.
La agencia oficial de noticias Xinhua ha revelado que entre los detenidos algunos han admitido abiertamente el uso de melamina. Uno de ellos explicaba que en el pasado su leche fue rechazada por la empresa Sanlu debido a su bajo contenido proteico. Después descubrió que si añadía melamina aumentaba el nivel proteico en las pruebas y de esta manera Sanlu aceptaba la leche.
Como hemos visto, se han hecho intentos de desviar la atención de las grandes empresas para culpar a los pequeños granjeros que suministran la leche. El problema, no obstante, es que los pequeños granjeros dependen de los intermediarios, éstos empujan a la baja el precio de lo que producen los pequeños campesinos. La demanda de productos lácteos ha aumentado rápidamente, durante los últimos años, la industria en su conjunto ha crecido aproximadamente un 30 por ciento al año.
Para aumentar la producción los pequeños granjeros han tenido que aguar la leche, pero esta práctica reducía el nivel proteico y entonces la leche no era aceptada por las grandes empresas. ¡Es ahí donde entra la melamina!
Ahora, como resultado de este escándalo la industria láctea china sufre una crisis seria, cada vez son más los países que prohíben la importación de productos lácteos chinos. El gobierno ahora intenta desesperadamente recuperar la reputación de su industria láctea y toma medidas para revisar seriamente todo el sistema de recogida de leche.
El escándalo revela el cinismo de estas personas. Cuando los padres se quejaron de los síntomas que padecían sus hijos no encontraron muchas simpatías entre los funcionarios. Cuando el escándalo estalló, provocando la indignación de los trabajadores, entonces sí tomaron medidas. Ahora que sus beneficios se ven seriamente afectados se dan prisa por tomar medidas. La industria láctea china se calcula que está valorada en aproximadamente 20.000 millones de dólares, así que es normal que estén preocupados por arriba.
Este escándalo refleja la codicia por el beneficio que se
El escándalo por la leche contaminada en China sigue extendiéndose. De dos han pasado a cuatro los niños muertos y algunas noticias hablan de seis. Cuando el escándalo estalló el gobierno tuvo que intervenir y ordenó una investigación nacional de todas las leches en polvo infantiles. La investigación oficial ha encontrado que el 20 por ciento de las empresas lácteas chinas están implicadas. El Grupo Sanlu hay estado distribuyendo leche que contiene melamina, un producto químico que puede hacer que el nivel proteico de los productos lácteos parezca mayor del que realmente es.
Por ahora han muerto dos niños y 50.000 están enfermos, algunos han desarrollado problemas renales. El responsable de la empresa Sanlu fue despedido pero ¿cuántas cabezas tendrán que rodar próximamente?
En la investigación inicial se analizaron 109 empresas lácteas, de ellas 22 vendían leche con melamina. Even Yili, que suministró la leche para los Juegos Olímpicos de Pekín, es una de las implicadas en el escándalo, junto con otras muchas más.
Según publicaba Chinanews.com, el presidente de Sanlu “tenía una gran responsabilidad” en lo ocurrido. ¿Pero cómo se puede culpar de todo esto a una sola persona? Desde marzo, los padres se han estado quejando a la empresa de la orina descolorida de sus bebés. En realidad, se ha descubierto que Sanlu era consciente del problema de la melamina desde el pasado mes de diciembre. ¿Por qué no hizo nada entonces? Algunos niños en marzo ya fueron admitidos en el hospital, así que los directores de la empresa no pueden alegar ignorancia.
El Grupo Sanlu ha intentado descargar toda la responsabilidad sobre los pequeños granjeros que suministran la leche. Según la agencia de noticias Xinhua, varios han sido detenidos, uno de ellos producía 3 toneladas de leche diarias contaminadas con melamina. El 17 de septiembre, fueron detenidas 22 personas sospechosas de utilizar el producto tóxico.
Si una investigación inicial ha encontrado la implicación de 22 empresas junto con la implicación de los pequeños comerciantes en esta práctica de añadir un producto tóxico a la leche en polvo, entonces el problema no es de una sola empresa o de un solo alto ejecutivo. No sólo la industria láctea se ha visto afectada en el último período por escándalos de este tipo. En 2004 murieron al menos 13 bebés después de beber leche en polvo adulterada, otras empresas de alimentación también han estado implicadas.
La agencia oficial de noticias Xinhua ha revelado que entre los detenidos algunos han admitido abiertamente el uso de melamina. Uno de ellos explicaba que en el pasado su leche fue rechazada por la empresa Sanlu debido a su bajo contenido proteico. Después descubrió que si añadía melamina aumentaba el nivel proteico en las pruebas y de esta manera Sanlu aceptaba la leche.
Como hemos visto, se han hecho intentos de desviar la atención de las grandes empresas para culpar a los pequeños granjeros que suministran la leche. El problema, no obstante, es que los pequeños granjeros dependen de los intermediarios, éstos empujan a la baja el precio de lo que producen los pequeños campesinos. La demanda de productos lácteos ha aumentado rápidamente, durante los últimos años, la industria en su conjunto ha crecido aproximadamente un 30 por ciento al año.
Para aumentar la producción los pequeños granjeros han tenido que aguar la leche, pero esta práctica reducía el nivel proteico y entonces la leche no era aceptada por las grandes empresas. ¡Es ahí donde entra la melamina!
Ahora, como resultado de este escándalo la industria láctea china sufre una crisis seria, cada vez son más los países que prohíben la importación de productos lácteos chinos. El gobierno ahora intenta desesperadamente recuperar la reputación de su industria láctea y toma medidas para revisar seriamente todo el sistema de recogida de leche.
El escándalo revela el cinismo de estas personas. Cuando los padres se quejaron de los síntomas que padecían sus hijos no encontraron muchas simpatías entre los funcionarios. Cuando el escándalo estalló, provocando la indignación de los trabajadores, entonces sí tomaron medidas. Ahora que sus beneficios se ven seriamente afectados se dan prisa por tomar medidas. La industria láctea china se calcula que está valorada en aproximadamente 20.000 millones de dólares, así que es normal que estén preocupados por arriba.
Este escándalo refleja la codicia por el beneficio que se ha extendido por toda la economía china. Ya sea propiedad privada o estatal, las empresas chinas ahora sólo se preocupan por una cosa, ¡el enriquecimiento de unos pocos! Las autoridades cerraron los ojos… hasta que estalló el escándalo y los niños murieron. Han tenido que intervenir e intentar restablecer algún tipo de orden. Pero castigan al individuo para salvar al sistema en general. Lo hemos visto en muchas ocasiones, no van a eliminar la búsqueda ávida de beneficio. La economía de mercado es capitalismo, el capitalismo no se preocupa por las necesidades de las personas. Su Dios es el beneficio.
Lo que hace falta no es simplemente despedir a uno u otro director individual. El que debe desparecer es el sistema en su conjunto. Los trabajadores chinos han pagado un precio muy duro por el “camino capitalista”. En su experiencia cotidiana están aprendiendo lo que es el capitalismo. En determinado momento llegarán a la conclusión de que el sistema debe desaparecer. ¡Eso es lo que aterroriza a los dirigentes del presunto “Partido Comunista”!
ha extendido por toda la economía china. Ya sea propiedad privada o estatal, las empresas chinas ahora sólo se preocupan por una cosa, ¡el enriquecimiento de unos pocos! Las autoridades cerraron los ojos... hasta que estalló el escándalo y los niños murieron. Han tenido que intervenir e intentar restablecer algún tipo de orden. Pero castigan al individuo para salvar al sistema en general. Lo hemos visto en muchas ocasiones, no van a eliminar la búsqueda ávida de beneficio. La economía de mercado es capitalismo, el capitalismo no se preocupa por las necesidades de las personas. Su Dios es el beneficio.
Lo que hace falta no es simplemente despedir a uno u otro director individual. El que debe desparecer es el sistema en su conjunto. Los trabajadores chinos han pagado un precio muy duro por el "camino capitalista". En su experiencia cotidiana están aprendiendo lo que es el capitalismo. En determinado momento llegarán a la conclusión de que el sistema debe desaparecer. ¡Eso es lo que aterroriza a los dirigentes del presunto "Partido Comunista"!
Source: El Militante